La salud mental incluye nuestro bienestar emocional, psíquico y social y el equilibrio de estos mismos elementos. Nuestra sana condición mental afecta en como resolvemos los problemas con mayor exactitud, la forma en como pensamos, sentimos y actuamos.
La salud mental no sólo significa la ausencia de alguna enfermedad o daño que implique la alteración del bienestar, sino mantener una conexión entre mente, cuerpo y alma.