Las personas vivimos intercambiando energías:
Se sienten claramente al saludar a alguien con una sonrisa, las tensiones acumuladas se liberan en ese momento, lo que hace sentir cierta armonía que nos invita a devolver la misma energía positiva.
Por lo contrario si nos encontramos con una persona que no precisamente saluda con una sonrisa, se inicia un discurso de críticas, lamentando que todo le sale mal o que qué le sucede. En ese instante dejamos ir y permitimos el ingreso de una carga de energía negativa. Sin embargo esa situación puede cambiar si hacemos fluir un campo energético positivo, por ejemplo cambiando de ritmo la conversación hacia la búsqueda de soluciones, siendo concretos y empáticos.
La vida cotidiana es una constante de interacciones con otros en el mundo, ocurre una transferencia de energía mental a través de nuestras emociones como de nuestras tensiones.
PERDEMOS ENERGÍA MENTAL CUANDO:
Nos preocupamos por sucesos que se escapan de nuestro control y sobreviene el estrés.
Dispersando nuestra atención a puntos irrelevantes y descuidamos prioridades.
Cuando no tenemos la suficiente destreza en una tarea porque generamos tensión o no nos motiva lo suficiente.
Cuando vivimos en estado pasado y futuro constante y no en el presente (aquí y ahora).
Cuando nuestros diálogos se basan en críticas o juicios nada constructivos.
OBTENEMOS MÁS ENERGÍA MENTAL CUANDO:
Hacemos ejercicios físico.
Dormimos bien.
Cuando tenemos relaciones familiares, amorosos y sociales equilibradas.
Meditar descarga diariamente la energía negativa acumulada.
Hacer servicio comunitario o compartimos con otros parte de nosotros.
Cuando tenemos una adecuada alimentación.
Si realizamos actividades o trabajo que nos guste.
Conectarse con la naturaleza.
Seguir una visión de vida.
Para mantenernos energéticos es importante encontrar fortalezas para hacer lo que nos gusta, deshacernos de lo que nos hace ruido y nos perturba. Buscar gratificarnos por lo que vamos logrando, valorando lo que tenemos. Si logramos hacer algo de todo esto, podemos convertirnos en una fuente de energía positiva.
FUENTE:
http://pensamientospoderosos111.blospot.com